Son muchos los tipos de tubería para agua fría y caliente que pueden usarse en la instalación de fontanería de una vivienda. Sin embargo, como fontaneros profesionales sabemos que no todas las tuberías para agua potable pueden usarse por igual. Te contamos las distintas opciones que hay tanto en tuberías de plástico como de metal, ya que cada material tiene unas características particulares y se recomienda para un uso distinto.
Tuberías de agua de plástico
Las tuberías de plástico son muy populares ya que suelen resultar más económicas, aunque no todas se pueden usar para el transporte de cualquier tipo de agua en una vivienda. Veamos las más comunes.
Tuberías de PVC
Son habituales para transportar agua a alta presión por lo que se pueden encontrar en diferentes tamaños para su uso en construcción y trabajos de fontanería. Sin embargo, tienen un gran inconveniente. No se pueden utilizar en ningún caso para transportar agua caliente ya que las temperaturas elevadas pueden llegar a derretirlas. Suelen ser de color blanco o gris.
Tuberías de CPVC (Policloruro de Vinilo Clorado)
Este material derivado del PVC sí que puede usarse para el transporte de agua caliente, por lo que su uso es común en multitud de viviendas. Además, son bastante populares porque su diámetro es muy similar al de las tuberías tradicionales de cobre.
Tuberías de polietileno reticulado (PEX)
Los conductos de este material se usan habitualmente en sistemas de calentamiento como calderas o calentadores de agua caliente sanitaria, ya que tienen una gran resistencia al calor. Lo que no ocurre con las tuberías multicapa cada vez menos usadas en fontanería. Su color es blanco, aunque se solemos verlas en rojo y azul para marcar el paso de agua caliente o fría.
Tuberías de metal para el agua en viviendas
Se trata de el material más usado tradicionalmente, aunque no todos los metales se comportan igual ni ofrecen las mismas prestaciones.
Tuberías de cobre
Este es el metal más usado en tuberías domésticas, aunque evidentemente tiene un precio mayor que las de plástico. Sin embargo, su resistencia a los cambios de temperatura y la corrosión hace que sean muy populares. Se trata de los conductos que más nos encontramos al hacer servicios de desatascos.
Tuberías de acero inoxidable
Son los conductos menos comunes debido a su elevado precio. Sin embargo, es posible encontrarlas en viviendas cercanas al mar, ya que ofrecen una resistencia muy elevada frente a la corrosión del agua salada.
Tuberías galvanizadas
Los conductos de acero galvanizados son bastante habituales, ya que este tratamiento previene la oxidación del metal y ofrece una gran resistencia frente a la corrosión. Aunque lo cierto es que en los últimos años se han ido sustituyendo por tuberías PEX que resultan más económicas.
Fontaneros en Madrid.